Después de ver la película Noche de Fin de año me retracté y pensé que mis últimas noche del año tampoco estaban tan mal. Aunque mejor que la malísima cinta, nunca ha sido uno de esos momentos inolvidables de mi vida, incluso más de una vez ha dado lugar a malentendidos, borrachos que te dan el coñazo, el agobio de saber qué hacer y con quién y sin quedarte sin blanca ni sufrir apretones.
Una noche fantástica puede serlo cualquiera – a excepción de la de fin de año, parece-. Con música bailable y acompañada de amigas que les guste moverse con temas rollo Madona, Kyle Minogue, Raffaella Carra, Alaska, Mécano con su Un año más y algunos éxitos recientes como Fade out lines de The Avener, Get Lucky de Daft Punk, Ain’t Nobody (Loves Me Better) de Jasmine Thompson y otros que ahora no se me ocurren, ya soy feliz.
Diréis que una buena marcha de fin de año tendría que tener chicos. No lo negaré. Pero si hay temazos no puedo ligar. Primero si la música está muy fuerte no entiendo qué me dicen y lo paso fatal porque no quiero que crean que soy una cabeza hueca… Entonces empiezo a sonreír y a decir que sí en plan mujer florero y claro me puedo meter en unos fregados… Pero si hay temazos de verdad no puedo ligar porque aunque esté el tío más buenorro del mundo mundial no puedo evitar moverme y dejarme llevar y, si consigo reprimirme, me da tanta rabia estar perdiéndome ese momentazo que no le atiendo y entonces él empieza a pasar… Aunque después me pueda poner la canción en el YouTube no es lo mismo.
A la espera de que por fin llegue un fin de año como Dios manda, pido que para empezar este nuevo año, haya buena música bailable. Si cuando ya estemos un poco cansadas y la melodía ya sea más coñazo estaría bien conocer a unos tíos interesantes en un lugar donde pueda hablarse sin chillar. Sin embargo, lo más importante de todo es que este 2016 aunque haya momentos difíciles sean para crecer, conseguir cosas buenas y alcanzar nuestros sueños. Siento ponerme en plan egoblogger.
Como todo el mundo esta haciendo un repaso de las mejores bodas, nacimientos, películas, libros o las más elegantes y trendy del año, yo he pensado en dejaros los 12 post con más visitas de estos dos años de vida del blog. Sería algo así como un post para cada campanada.¡Feliz 2016!
1. El escándalo de los kilos de más. Creo que el éxito de este post se debe al morbo de ver a Tania Llasera con unos quilos de más y además lo publiqué al poco tiempo de que saliera la noticia. En este sentido no es de los que estoy más orgullosa, pero sí que la idea de fondo (que no sé si se ha entendido en medio del sensacionalismo) es capital en este blog. Mi objetivo era criticar que cuando una mujer engorda (pienso también en Esther Cañadas) es noticia y todo el mundo debe opinar. Ojalá pasara lo mismo cuando exista igualdad de verdad.
2. Por qué los 30 son los nuevos 20. En realidad este post define la esencia del blog. Vivimos como universitarios pero no porque seamos unos Peter Pan que no queremos asumir responsabilidades sino porque vivimos submergidos en la precariedad. Claro que también aprovechamos esta situación más libre de “ataduras” para disfrutar de sus ventajas.
3. Cosas que las solteras “emparejadas felices” dicen a las “solteras desesperadas”. Me encantó que tuviera éxito porque a veces pensaba que yo era la única que hacía las cosas mal y tenía que aguantar consejos de difícil fiabilidad.
4. Los treintañeros solteros han sido secuestrados. Surgió después de una noche donde mis amigas solteras y yo sólo encontrábamos niñatos o cincuentones. Con los centenares de mensajes que recibí, di por hecho que es un fenómeno extendido por todo el país.
5. Treintañeras al borde de un ataque de nervios. Debo decir que una de las cosas más duras de la soltería (y que más me cuesta aceptar de los 30) es que personas con las que has compartido momentos fantásticos a lo largo de tu vida (cole, universidad, salidas, carrera profesional…) ahora viven situaciones muy distintas y con otras prioridades como la maternidad, un matrimonio, una relación estable… Y no es lo mismo… Únicamente que todas siempre estamos al borde de un ataque de nervios para conseguir amoldarnos a las convenciones que nos imponen.
6. Treintañeras en busca de su sitio. Era una época que estaba muy estresada en el trabajo y justo estuve en Madrid con amigos de la universidad que veo muy poco pero con los que tengo mucha conexión. Nos reímos mucho de cuando terminamos la carrera en el 2006, antes de la crisis, nos pensábamos que nos comeríamos el mundo y a la hora de la verdad hemos tenido que hacer malabares para que no nos despidieran y de un trabajo que no era el soñado. Sin embargo, lo mejor fue que a pesar de no ser lo más, disfrutamos muchísimo de ese momento juntos (ojalá se vuelva a repetir).
7. Los autoengaños femeninos más habituales. Ello demuestra que las mujeres somos muy sinceras con nosotras mismas y que nos sabemos reír de ello.
8. Por qué los 90 siempre serán únicos / Bershka no es país para treintañeras. Con el primer título no llamé la atención de los lectores – y mira que los 90 son maravillosos y pensaba que el factor nostalgia emocionaba- pero fue poner una foto de las bragas de Bridget Jones y mezclarlo con la marca adolescente por antonomasia y las treintañeras y lo petó.
9. Pedroche y sus bragas son trending topic. En realidad en este post hago mucha referencia al blog Genericidios porque creo que la clavó analizando el hecho que la Pedroche saliera en bragas las pasadas campanadas. Gracias a él, que protagonizó varios artículos, también conseguí colarme entre los tuits que Verne de El País seleccionó para abordarlo. Además del subidón, fue un modo de conseguir visitas a mi bitácora. Aunque lo mejor fue que muchísimas mujeres y hombres se indignaron en masa a la hora de ver una mujer florero en la televisión.
10. Los inútiles de letras. Surgió a raíz de una conversación con uno de mis mejores amigos de la universidad que ahora es profesor de secundaria de materias de letras. Me contó decepcionado que en muchísimas escuelas relegaban las letras y a los alumnos ni se los motivaba a estudiarlas. Y con la Ley Wert se confirma todo ello. Por favor, no quiten la filosofía ni las humanidades, ayudan a entendernos y a pensar por nosotros mismos.
11. Las bodas y los solteros. Una experta en bodorrios lo escribió, por tanto no podía defraudar.
12. Mi cuerpo no es para Victoria’s Secrets. Como el de la mayoría de mujeres del mundo, por eso queremos que no se nos esclavice con modelos de mujer que son casi inexistentes.